Por: Ernesto Altamirano

SANTA CLARA, CA – El aclamado artista The Weeknd, cuyo verdadero nombre es Abel Makkonen Tesfaye, hizo vibrar al Levi’s Stadium en Santa Clara con entradas agotadas el sábado 27 de agosti por la noche en la parada en el área de la bahía de su gira “After Hours Til Dawn” tour

A las 8:30pm, 45 minutos antes de que The Weeknd subiera al escenario, la multitud ya estaba rugiendo con anticipación. Cada pocos minutos, una sección comenzaba a gritar como si el artista hubiera subido al escenario, lo que provocaba un frenesí de fanáticos que se subían a las sillas y sacaban sus teléfonos a pesar de que los productores tecnológicos claramente todavía estaban en el escenario preparándose. Esta fue una gran indicación de cuán listos estaban los fanáticos para su gira largamente retrasada. Poco despues de las 9pm, The Weeknd no les hizo esperar más.

Construido con grandes edificios de aspecto postapocalíptico, la configuración del escenario presentaba cimas de rascacielos en ruinas, humo y luces de las que The Weeknd se levantó para comenzar el espectáculo con “Alone Again” del álbum “After Hours”. Un grupo de bailarines con velo, vestidos de pies a cabeza con una tela ondulante de color rojo brillante, se movían en círculos rítmicos, que recuerdan un ritual religioso. The Weeknd, por otro lado, vestía un conjunto completamente negro, que incluía una gabardina con forro de seda roja y guantes negros.

Detrás de los edificios en el escenario, la pantalla se llenó con un paisaje urbano, a veces una hermosa puesta de sol, a veces un infierno ardiente, según el punto del espectáculo. Para empezar, la ciudad estaba enmarcada por un colorido atardecer alumbrada por un foco blanco. Abajo, en las calles de la ciudad, los bailarines se pararon solemnemente y observaron a la multitud.

The Weeknd se quedó en el escenario principal durante las primeras canciones mientras interpretaba “Gasoline”, “Sacrifice” y “How Do I Make You Love Me?” con la voz suave y los movimientos de baile al estilo de Michael Jackson por los que es conocido. Pronto se lanzó a uno de sus mayores éxitos, “Can’t Feel My Face”, mientras corría por el escenario de la pasarela que atravesaba a la multitud y culminaba en un círculo bajo una gran luna roja. Quitándose rápidamente la gabardina, la cual arrojó a los asientos del piso para que los fanáticos pelearan mientras corría de regreso al paisaje urbano.

De repente, la ciudad estaba en llamas cuando se lanzó a “The Hills”, una oda a una aventura sensual y una vida atrevida, mientras todo ardía a su alrededor. Como si eso no fuera suficiente, la pista también explotó en pirotecnia lo suficientemente caliente como para sentir que podría chamuscar a los que estaban sentados más cerca del escenario cuando la canción alcanzó su clímax. Un tema similar de anhelar ser un buen tipo pero resignarse a ser el malo se cuela en la mayoría de las canciones de The Weeknd, y un fondo de rascacielos en llamas parecía una imagen bastante adecuada para ello.

Tan rápido como llegaron las llamas, se fueron, y The Weeknd volvió al centro con gestos y movimientos de baile sugestivos, lanzando algunos de los favoritos de la multitud: “Starboy”, “Heartless”, “Party Monster” y “Or Nah” de Ty Dolla $ign. Su falsete sonaba claro como el cristal mientras cantaba estas canciones.

Cuando el espectáculo llegó a su fin con “Save Your Tears”, el telón de fondo de la ciudad volvió a aparecer, excepto que esta vez no parecía tan deteriorado y, en cambio, parecía representar un futuro más brillante. Su espectáculo terminó con su éxito con estilo musical de los años 80 “Blinding Lights” el cual hizo retumbar al Levi’s Stadium de Santa Clara con su lleno total de un jubiloso baile y emocionantes gritos.